lunes, 10 de mayo de 2010

Argentina y Chile liderarán trabajo sobre transparencia en gastos de defensa

Quito, 7 may (EFE).- La II reunión ordinaria del Consejo de Defensa Suramericano, de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), concluyó hoy en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil con la decisión de promover la transparencia en gastos de defensa, de lo que se encargarán Argentina y Chile.
Según un comunicado del ministerio de Defensa de Ecuador, estos dos países "se comprometieron a liderar un Grupo de Trabajo para el desarrollo de una metodología tendente a resolver elementos técnicos y de diseño del sistema de medición de los gastos de la defensa de nuestros países sobre una base común y de aceptación general".
Además se delega a "Argentina y Chile para la elaboración de una propuesta que contenga temas a ser incluidos en la Agenda Temática de la IX Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas el 22 y 25 de noviembre en Bolivia".
Entre los puntos de interés de la reunión se encuentra la aprobación de "los Estatutos del Centro de Estudios Estratégicos de la Defensa, como instancia para la generación de conocimiento y difusión del pensamiento estratégico suramericano en materia de defensa y seguridad".
La cita concluyó con la denominada "Declaración de Guayaquil", en la que se destaca "la decisión de contribuir al fortalecimiento de la paz en la región, a través del diálogo y la cooperación", según el ministerio.
Los responsables de Defensa de los doce países que forman Unasur, reafirmaron "el irrestricto respeto a la soberanía, integridad e inviolabilidad territorial de los estados, la no injerencia en asuntos internos y la autodeterminación de los pueblos, para consolidar la integración regional".
Por otra parte se puntualiza que "las medidas de fomento de la confianza y seguridad promueven el entendimiento entre los estados, y fortalecen la estabilidad" suramericana, sin mayores precisiones.
La reunión de ministros de Defensa comenzó ayer tras deliberaciones de diversos temas por parte de los viceministros del ramo.


Agencia EFE

jueves, 25 de septiembre de 2008

Tomás Hirsch y la crisis económica

“Es el precio que paga el mundo por un modelo neoliberal antihumano”

Santiago, 24 de septiembre.- Ante el aprieto financiero que vive Estados Unidos nadie queda exento. Es parte de vivir en un sistema globalizado, donde todos los países están amarrados a un mercado cíclico y oscilante. Es hora de “Fortalecer el proyecto de una integración Latinoamericana” y no depender de irresponsables, dice el vocero Humanista.

Hace trece meses que se vive una de las crisis más profundas en la economía mundial. Desde la Gran Depresión del ’29, donde Chile fue uno de los países más afectados por la dependencia de sus exportaciones, que no se resentía tanto la billetera global. Es la crisis “subprime”, que es, en simple lectura, el otorgamiento de créditos hipotecarios altamente riesgosos, que los expertos llaman “hipotecas basura”. Este ejercicio ha llevado a la quiebra a colosos como Lehman Brothers o Merrill Lynch. Como plan de rescate el gobierno estadounidense aplicará un salvataje de U$700.000 millones para ocuparse de las deudas de sus entidades bancarias. Hirsch es escéptico: “Es una situación absolutamente falsa, ficticia, en la cual el gobierno de EE.UU. les termina entregando dinero sabiendo que son empresas con ganancias astronómicas”.

Lo cierto es que hay más factores que hicieron inevitable el agotamiento del mercado. “La globalización se ha caracterizado por un crecimiento de la pobreza y una marcada tendencia a la concentración de la riqueza” escribe el economista Marcel Claude. Y agrega que en las últimas décadas del siglo pasado el número de pobres se ha incrementado en cien millones de personas, independiente de una economía mundial que ha “crecido”. Sumado a esto, la sobreexplotació n de los recursos naturales tiene atorado al ecosistema. La presión que se ejerce con la alta demanda de la economía hacia las pesquerías, bosques, minerales, entre otros, provoca un aumento en los costos de producción y la pérdida de proyectos de inversión que no pueden cubrir esos gastos. “(La crisis) es el precio que paga el mundo por un modelo neoliberal profundamente antihumano, uno que se basa en el altísimo e ilimitado consumo del petróleo, que transforma los campos de producción de alimentos hacia la producción de biocombustibles, un modelo que impone la fuerza militar para el control de distintas zonas del planeta. Evidentemente es un modelo que termina colapsando”, apunta Tomás Hirsch.

Según los siempre tranquilizadores discursos gubernamentales, Chile tiene una economía fuerte y no sufrirá grandes consecuencias, mas cabe recordar que los fondos de pensiones de los ciudadanos están invertidos en acciones en el mercado mundial, y ya se han perdido más de 18 mil millones de dólares. Y, además, la fortaleza económica que presentan las empresas internas con títulos en la bolsa (fortaleza representada en utilidades), se da por las alzas de tarifas que sufren los clientes. Que seguro con el tiempo aumentarán para estabilizar la economía. “En esta crisis lo que se ha provocado una suerte de capitalismo- comunista, es decir, las ganancias fueron siempre para el sector privado, y ahora que llegó el momento de salvar a los bancos se hace con la plata de todos los ciudadanos de los países ricos y pobres”, sentencia el vocero humanista.

Por último, es válido apuntar que el Buró Presupuestario del Congreso estadounidense, en una evaluación realizada el 2003, señaló que la deuda externa de su país alcanzará los 14 billones de dólares dentro de diez años, a partir de esa fecha. Y que en los próximos cincuenta años la cifra llegará a los 44 billones. Esta inestabilidad sin duda traerá consecuencias para los países que tienen tratados comerciales con ellos, como Chile. “Este es el momento para fortalecer el proyecto de una integración Latinoamericana, en la cual, entre otras cosas, se tenga una moneda propia. Hoy, depender del dólar para el intercambio entre nuestros países es tremendamente riesgoso. Es ponernos en las manos de los mismos irresponsables que han generado esta crisis. Es urgente avanzar en propuestas como la del Banco Sur y Petrosur”, concluye Hirsch.


Eduardo Muñoz
Periodista

jueves, 25 de octubre de 2007

Los ví volver...Una Parte de la Euforia

Con el apagón total de luces en el Nacional se ponía fin a una década de larga espera. En pocos segundos me enfrentaría al espectáculo que tantas veces soñé y que hasta hace algunos meses parecía imposible. La ansiedad en las miles de personas que repletábamos la cancha se sentía a flor de piel. Parecía que en cualquier momento todo iba a explotar y yo sólo imaginaba la sensación que me provocarían los primeros acordes. A esas alturas, el cansancio ya ampezaba a afectar a muchos de los que estábamos desde hacía cinco horas y algunos más, esperando por el show.










Pasadas las 4 de la tarde llegué al Nacional, minutos antes de que se abrieran las puertas. La espera afuera se amenizaba tomando bebida y mirando todos los souvenirs que ofrecían los comerciantes. Poleras, jockeys y cintillos con la frase "ME VERÁS VOLVER" eran los preferidos. A las 4:30 en punto se abrieron las puertas y en ese momento comenzaba la cuentas regresiva. Tras el paso por la vigilancia, todos corríamos a buscar el mejor lugar posible en la cancha, que en pocos minutos se llenó. De ahí la espera la acompañé con la previa relatada por la radio, en que las canciones de Soda no paraban de sonar.



Durante la última hora y cuando la gente ya empezaba a impacientarse por las pantallas ubicadas a los costados del imponente escenario se pudieron ver algunos videos de spots cómicos alusivos a Soda Streo. Quedaba menos, diez minutos y los "ohhh, ohhh, ohhh" hicieron su estreno, seguido por los "olé, olé olé olé, Soda, Soda".


Hasta que llegó el momento, entre la oscuridad del escenario comenzaron a sonar los acordes de guitarra de "Juego de Seducción" y la explosión fue instantánea. Entonces vino el punteo y las luces mostraron en todo su esplendor a la banda, el power trío más importante del rock latinoamericano estaba frente a nuestros. "Voy a ser tu mayordomo" cantaron las 65 mil personas, que taparon abolutamente el sonido de la banda. La efervesencia era desbordante, era imposible estar quieto y tranquilo, más aún cando Cerati dijo que era hora de "moverse" con "Tele-K", canción fiestera por excelencia que hizo sltar a todo el estadio.








Hasta ahí todo sin sorpresas, hasta que vino "Imágenes Retro", son su guitarra que me hizo estremecer y su "telarañas, sueño con telereñas" coreados mágicamente por todos. Y digo mágicamente porque es una de las menos conocidas masivamente, pero los que estábamos ahí érmos sólo fanáticos y esto era precisamente lo que esperábamos, que nos sorprendieran con canciones extraídas dese las profundidades de los primeros discos.


El éxtasis todavía no bajaba cuando la ahora distorsionada guitarra comenzó a tocar el riff de "Texturas" que reconocí de inmediato y me volvió loco. Se trata e la última canción del álbum Dynamo, el más experimental y futrista-visionario disco de la banda. Ésa si que no la esperaba y es una de mis favoritas. Sólo rock.


Después de esa euforia inicial vino un momento de calma, llena de nostalgia y emoción plagado de hits. Hombre al Agua, La Ciudad de la Furia, Pic nic en el 4ºB, Zoom y Cuano Pase el Temblor, rematada con un ritmo reggetonero que le dio un toque de modernidad que le cayó muy bien.


El momento de tranquilidad necesaria para seguir lo dio Final Caja Negra, otro clásico desconocido del excelente disco Signos del 87. Para seguir con la avalancha de éxitos como Trátame Suavemente, Signos, Sobredosis de TV, Danza Rota y Persiana Amerciana. Cabe destacar que todas ellas fueron tocadas en su versión original, pese a tener más de 20 años en algunos casos, sonaron rockeras y actuales. Sobre todo cuando el volumen estuvo a la altura de las circunstasncias, tras las dos primeras canciones en que apenas se distinguía.

Hasta aquí, del fantástico juego de luces anunciado, poco y nada habíamos visto, hasta que Cerati hizo apagar las luces del público y encender los celulares para crear la atmósfera necesaria para tocar "Fue", otro trmendo tema del Dynamo que trajo consigo el verdadero estreno del juego de luces. Las tres pantallas gigantes detrás de los músicos, unidas a las tres parrillas circulares que bajaban del techo para superponerse a las pantallas y generar un juego magnífico y brillante, nunca antes visto en Chile. Perfecto para esa canción y para "En Remolinos" y "Primavera 0", las dos máximas expresiones de rock del show y que también forman parte de Dynamo. Personalmente, ese episodio fue lo mejor. Con qué oficio y calidad tocaron y qué bien se complementaron las luces con el sentido de lo que estaban tocando.


El intermdio lo dio una versión ultra rockeada de "No Existes" del Signos. Una versión que le dio nueva vida a una canción que tiene 20 años y que perfectamente pudo haber sido compuesta en esta década. Ésta dio el paso al paquete del Canción Animal de 1990, para muchos el primer disco de Rock de Soda, con canciones como "Sueles Dejarme Solo", "En el Séptimo Día", "Un millón de años luz" mención especial para el juego con los efectos que dieron una sensación de espacio exterior, "De Música Ligera" y "Cae el Sol", todas con una impronta rockera que dejó una sensación de satisfacción inigualable.



Sólo el fin del show careció de la emotividad necesaria y correspondiente, salieron dos veces del escenario y terminaron con Disco Eterno, Prófugos, Zona de Promesas y para el cierre definitivo, Nada Personal, una que era esperada por muchos, incluyéndome, y que le dio el final perfectro a una noche redonda.




Feliz, un sueño cumplido, más aún cuando tengo la certeza que fueun mejor show que el último que dieron antes de separarse el 97, cargado a los 80 y rescatando sólo lo mejor de los 90. Coincidieron casi en un 100% mi gusto con las canciones escogidas, así que no quedé con gusto a poco en ningún sentido. El mejor concierto de Soda, el mejor grupo de Latinoamérica sin ninguna discusión.